La combinación de mampostería de antracita con elementos de fachada de color roble le ha dado a la confortable vivienda el aspecto moderno y contemporáneo que el cliente y el arquitecto estaban buscando. En este sentido, el carácter sostenible y de fácil mantenimiento de las placas de fachada constituye un importante valor añadido. "A través del diseño contamos una singular historia arquitectónica en la que la elección del material, la luz y el equilibrio juegan un papel importante. Gracias a la gestión de Guus Vedder y la profesionalidad del contratista, hemos logrado un resultado muy atractivo en 14 meses.”